Ella andaba con los hombros apuntando al núcleo de la tierra, con las piernas cansadas de tropezar, con los ojos húmedos por los nostálgicos recuerdos y con el corazón perdido en su historia. Ella no podía creer como aquel nombre ardía en su garganta. Ella caminaba sin rumbo fijo. Ella había perdido el mapa, ella se había perdido a ella.
Pero el destino es sabio y su Dios todopoderoso, ella ahora no lo entendía pero muy en el fondo sabía que algo grande le esperaba. Ella ahora lloraba, sin saber que "mañana" olvidaría por completo lo que se siente estar triste. Ella ahora había perdido la fe en si misma, pero tranquilos, que "mañana" ella se va a comer el mundo.
Le esta costando darse cuenta, que en la historia de la vida no se puede ser siempre la princesa enamorada. Hay momentos en los que se necesita alzar el pecho y recordar que solos vinimos y solos nos iremos. No me refiero a que en lo sucesivo no podamos encontrar el amor ideal, sino, a que nuestros sueños son solo nuestros y es nuestro deber cumplirlos.
Siempre se tiene "10 segundos" de sufrimiento antes del minuto de plena felicidad. Así que si hoy estas como Ella, recuerda que solo se miran las estrellas alzando la cabeza.
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